jueves, 29 de noviembre de 2012

Water Reflection.


Let's just be Silent, and watch that beautiful view. 

sábado, 24 de noviembre de 2012

Verdaderos sentimientos.

Y se lanzó. No le importaba nada más, que decirle lo que su corazón gritaba desde hacía ya tiempo.

Te quiero.

Ella se quedó perpleja. Ya lo sabía, pero jamás imaginó cuán lejos podían llegar esos sentimientos. Jamás imaginó que ese tipo de amor existiera. Jamás imaginó que la persona que portaba ese tipo de amor, fuera Él. 

Por ella. Para ella.

—¿A..., a qué viene esto?

—A que ya es hora de decir la verdad.

Apenas tuvo tiempo de apartarse; él ya la tenía entre sus brazos. Protegida. Sonriendo como sólo Él sabía hacerlo. La miró fijamente. La atravesó con sus ojos azules como el cielo.

Ella se ruborizó, se olvidó de todo. Porque Él estaba ahí. No tuvo miedo.

Y se enamoró.

Siempre decía que Él era idiota. Ahora, para ella, era su héroe.

Bueno, en realidad, siempre lo fue.


Nunca más (2): Con los pies en la Tierra

—¡NARUTO! —grité mientras sonaba el molesto ruido del despertador electrónico.
Podía sentir cómo mi corazón palpitaba con fuerza, el sudor resbalando por el perfil de mi cara, mi respiración entrecortada. El nudo en la garganta, a punto de desatarse.

Permanecí sentada y me giré para apagar el despertador, intentando hacer el menor esfuerzo posible. ¿Las cuatro y media? ¿Pero quién narices había pensado que esa hora de levantarse era sentata? Entonces, lo recordé. No había cambiado la dichosa pila desde hacía unos días, y el reloj funcionaba cuando y cómo quería. ¡BINGO! Razon por la cual solía llegar tarde al hospital.
Genial; la situación mejoraba por momentos.

Sentía un dolor punzante en la cabeza, como si miles de agujas estuvieran rozándome sin llegar a atravesar la piel que recubría la fuente de mi inteligencia.

Bueno, inteligencia. Si realmente funcionara esa parte de mi cuerpo, no le habría dejado marcharse.
Pero lo hice. Y aquí estoy, lamentándome por algo en lo que yo soy la verdadera culpable.

Recordé el grito de antes y suspiré con resignación; la visita nocturna no tardaría en poner los pies en la oscura habitación. No me molestaba que mi madre viniera a ver como estaba, pero una parte de mí no podía aguantarlo. No podía porque veía su rostro lloroso y la culpa se hacía más grande. Muchas veces pensé que este sentimiento acabaría por quebrarme la espalda, la carga aumentaba y me asfixiaba. He hecho demasiado daño a la gente que quiero, porque soy egoísta. Y alguien me ha dado una buena lección, quitándome aquello que más quería pero que no era capaz de ver hasta perderlo.

Escuché unos pasos firmes y presurosos. Unos segundos, y ahí que estaba frente a mí.

—¡Sakura! ¿Estás bien? —Mebuki Haruno, la madre más bruta que te podías echar a la cara. Podía ser dulce si se lo proponía, claro. Pero solíamos chocar mucho. Fuera de la relación madre-adolescente, las dos teníamos el mismo carácter. Y eso, quieras que no, prende y termina explotando. Pero era una mujer admirable y valiente a la par, que estaba allí si la necesitabas. Todos tenemos nuestros puntos flacos, ¿no?


Se acercó a mi y me besó en la acalorada mejilla con delicadeza, para después sentarse en el borde de la cama y acariciar con cierta parsimonia mi cabello rosado. Al poco tiempo se dió cuenta de mi febril estado, lo que yo intentaba disimular, sin éxito. Hizo el amago de hablar, pero yo fuí más rápida.


—Estoy bien, tranquila. Sólo ha sido una pesadilla. Nada que no se pueda arreglar con un poco de agua fría —sonreí intentando parecer convincente, pero mis labios estaban hinchados y temblaban al pronunciar palabra. Mi cuerpo no paraba de sufrir espasmos. No había forma de disimular absolutamente nada.

Ví sus profundas ojeras y me puse todavía peor. Estos días casi no había dormido por culpa de mis gritos. Estaba claro, yo era una carga para todos.

—Hija, sabes que no me importa venir. Que no se te pase por la cabeza que me molestas ni ninguna tontería de esas.


Tarde. Me leyó el pensamiento de manera instantánea. No tenía secretos para ella.

Pero no me rendí, continué diciendo lo maravillosamente bien que estaba.

—Ven aquí, anda —me palpó la sudorosa frente para comprobar lo obvio. Ni falta que hacía, se veía a kilómetros de distancia—. Tienes fiebre. Túmbate un poco, que voy a por un analgésico..., de entre todos los que hay en esta casa.


Tengo que reconocer que me reí un poco; y ella también lo hizo.


—Es lo que tiene ser ninja médico, mamá —dije mientras sostenía su mano, evitando que se levantara—. Ya voy yo, no te preocupes. Mejor descansa, que entre tanta pesadilla no te he dejado dormir. Además, no quiero que te hagas un lío entre tanto potingue —bromeé un poco, intentando convencerla.


Pero las lagrimas escaparon sin más, después de pronunciar esa frase. Dolía. Dolía y mi garganta ya no podía seguir ennudada. No podía fingir estar bien cuando no sabía si él seguía vivo o muerto. No podía.


—Cariño... —me abrazó con fuerza y me miró a los ojos, esta vez, como su niña, ya no como mujer —Se lo agradecí. Porque en un momento como ese, no estaba para reproches. Me acercó un pañuelo que guardaba en mi mesita de noche para que me sonara, y mientras yo lo hacía, ella hablaba—. No quiero atosigarte con todo esto, pero tienes un hospital del cual eres casi la dueña después de Tsunade-sama y Shizune. Hay gente que depende de tí, hija, y no puedes tirar la toalla así. ¿Decepcionarías a tu maestra? Ha puesto toda su confianza en tí, y no dudo de que la enorgulleces muchísimo. Pero si vas a estar así, píde que te dé de baja por un tiempo. Estoy convencida de que no tendrá inconveniente. No es bueno ni para los pacientes ni para tí que estés así, y yo creo que un poco de descanso no hace mal a nadie, ¿verdad? —me sonrió con dulzura al decir esto último. 


—Puede que tengas razón... ¡Pero aún me quedan unas revisiones por hacer y...!


—¡Sakura, escúchame! —me interrumpió con brusquedad— ¿Qué fue lo que te dijo Tsunade?


—Un ninja médico no debe morir, no debe estar en primera línea de batalla. Porque si eso ocurre, el resto del grupo no tendrá salvación en caso de necesitarla. Lo primordial es estar a salvo para mantener a salvo a los demás —lo dije sistemáticamente, de carrerilla. Casi parecía que me lo había aprendido de memoria. Bueno, en realidad, así fue en su momento.


Aplicarlo, era otra historia.


—Cada uno tiene una función que desempeñar. Si no sabes cuál es la tuya, es mejor que no hagas nada. Al menos, hasta que lo tengas claro —empezó a mirarme con una dureza que podría atravesar mi alma y desmembrarme; poco a poco. Pero no me callé. Sabía que podía con esto. Pude cuando se fué Sasuke y podré ahora que no está...


Estallé en llanto. Y, con las lágrimas empapando cada vez más mis mejillas, con sus ojos escrutando mi interior, llenos de rabia, rabia llena de dolor, grité. Gritamos. Una y otra vez.


"¡Pero...! ¡Sakura! ¡Sé que puedo! ¿¡Pero no te ves!? ¡Necesitas...! ¡Cállate!"


—¡Bueno, bueno! ¿Qué pasa aquí? Vais a despertar a todo el vecindario.

De repente, ambas nos callamos para mirarle. Ahí estaba mi padre, Kizashi. Escrutándome con la mirada. 

Iba a hablar, quería contarle que ya no podía más, que mamá no me entendía y jamás lo haría. Que no podía quedarme sin hacer nada viendo como otros se esforzaban por mí. Pero me mantuve en silencio, encogida entre sábanas, empapada en sudor, con restos del dolor que me carcomía marcando mis mejillas.

Le hablé con mis ojos. 

Y estoy convencida de que él, en ese instante, lo comprendió todo.

—Es la pesadilla de todas la noches, ¿verdad? —avanzó hacia nosotras hasta sentarse a mi izquierda, para despues acariciar con parsimonia mi cabello rosado mientras me sonreía como sólo él sabía hacerlo.


Así era mi padre. Idiota, calzonazos, pero extremadamente cariñoso. Ahí que estaba dispuesto a echar una mano si le necesitabas. Podía calmar a mi madre, y eso ya era mucho decir. No sé, tenía ese algo que provocaba que le quisieras a pesar de sus tonterías. Él siempre; y cuando digo siempre es siempre, escuchaba.


Naruto era clavado a él. Sobre todo, en la sonrisa. Unas veces ocultaba dolor, otras manifestaba felicidad. Ambos tenían la capacidad de esconder sus dolencias y preocuparse por las de los demás. Era algo increíble.

Y lo sabía mejor que nadie; yo era incapaz de algo así. El egoísmo, la sombra que siempre me acompañó, de la mano del orgullo, hicieron que perdiera aquello que más quería.

Los recuerdos me cubrieron y empezé a sollozar de nuevo. Mamá, ya más calmada, me abrazó con delicadeza, y me escondí en su pecho. El manantial cargado de memorias no quería dejarme vivir en paz. 

"¡Basta!"


Escuché como una voz rota me llamaba y, poco a poco, fui desembarazándome de los brazos de mi madre para observar a los verdosos ojos. Sí, como los míos.

Pero no pude aguantar, desvié la mirada hacia el suelo de la habitación. Y callé. 

—Sakura... —noté el tacto de sus dedos en mi barbilla, la estaba alzando despacio, quería que le mirara. Quería que me enfrentara al problema cara a cara. 


Pero no me obligó a contestar cuando por fin nos cruzamos. Simplemente, sonrió otra vez, y palpó mi frente con sus gruesos labios. Sentí como las lágrimas retrodecían, el sudor se escondía, los ojos se abrían en sorpresa.


Era la manera que mi padre tenía de elogiar la parte de mi cuerpo que más odiaba.


Se alejó cuando comprobó que me había serenado. Volvío a revolverme el pelo antes de comenzar a hablar.


—¿Crees que a Naruto le hubiera gustado verte así?

Y no necesitó hablarme de hospitales, de víctimas, de responsabilidades. Sólo con esa frase, consiguió atención y determinación por mi parte.


Musité un no entre sollozos mientras me sobaba la nariz. Solté la mano que mamá tenía entre las suyas para poder girarme y coger de la mesita de noche un pañuelo de tela, anaranjado. Me soné estrepitosamente.


—Cielo, lo siento —mi madre fue la que rompió el silencio—. No debí gritarte así, se que estás asustada. Yo también. Pero entiende que tus amigos no podrán sobrevivir sin tu ayuda. Eres médico, debes permanecer alerta y a disposición de todos en una misión, y tal y como estás ahora, lo mejor es que descanses unas semanas. ¿Arriesgarías la vida de todos ellos? ¿Tu propia vida? ¿No decías que querías ser de utilidad por encima de todo?

Sabía que tenía razón. Sabía que los dos tenían razón. Eran las dos caras de una misma moneda. Mi padre era más sentimental, más impetuoso, más bromista, más cálido. Mi madre más seria, disciplinada y fría. Pero ambos, enérgicos y luchadores. A los dos les quería muchísimo.

Se complementaban entre ellos, y me complementaban a mí.

Suspiré y miré a ambos lados de la habitación. En unos segundos, ya me había abalanzado sobre ellos. Les abracé lo más fuerte que mis delgados brazos me permitieron. Me calmé, y al hacerlo, me separé de ellos para terminar la conversación.


—Podéis dormir tranquilos, está todo bien —vi el rostro de mamá, la culpabilidad que reinaba en él por haberme gritado minutos antes. Me acerqué a ella y la bese bien fuerte en la mejilla para dejar claro que no se tenía que preocupar más, que parte de la culpa, la mayoría, era mía—. Gracias. Gracias a los dos.


Mamá me acarició la mejilla y sonrió de lado, más animada. Yo correspondí a esa sonrisa, y me preparé para la que me esperaba al girarme y observar a mi padre.

Pero no encontré esa cálida sonrisa, sino otra, más forzada.

"¿Y ahora qué le pasa?"


Ambos se levantaron dispuestos a irse. Cuando mi madre giró la esquina de mi cuarto, papá se detuvo en la puerta.


—Puede que él esté vivo, quién sabe. Pero que no te bloquee el pensamiento del quizá. Él te prometió que volvería y lo hará. Eso es algo que no debes dudar en ningún momento. Pero, mientras le esperas, mantente con los pies en la tierra. Como siempre ha sido. Valiente y bella, al igual que una flor de cerezo. ¿Harás caso de lo que te digo, princesa? 


Finalmente, se volvió para mirarme.

Ahí estaba. La sonrisa.

Asentí llena de felicidad. Pero cómo le quería.

martes, 4 de septiembre de 2012

No te rindas nunca.

Cuando empiezas a disfrutar con las creaciones de los demás, entonces te conviertes en alguien realemente bueno. Porque ya no tienes a la vocecita de "él es mejor" acechándote. Tú eres tú, único e importante. Infravalorándote sólo conseguirás una cosa: no creer en tus posibilidades. Y, al igual que te intentas convencer de tu poca valía, surtiría el mismo efecto, incluso a mayor escala, si en lugar de eso dijeras:
PUEDO HACERLO.


jueves, 2 de agosto de 2012

Impotencia.











I wish I could see you now, as the nights roll by
Yes, time flies by and I wish you were here

I remember, you were there
You were there, yes you were there
I want to see you,

But I can't.

lunes, 23 de julio de 2012

"Se notaba con tan sólo mirarla..."


"It's not what you do for Naruto that's important... it's how strongly you feel about him that counts.
Sakura... I can tell just by looking at you... The truth is, you..."
- Yamato -

jueves, 19 de julio de 2012

Hacia donde el amor nos lleve.

—¿A dónde vamos, Sakura? —pregunto el muchaho rubio con una pizca de curiosidad.
—Hacia donde el amor nos lleve —le dió un delicado beso, sútil, pero lleno de sentimiento. Cogió una de las manos de él, y se lo llevó lejos.

Siempre juntos.

Y después de ese beso, todo estuvo claro.



—Te quiero. Con todo mi corazón.

—Neji-niisan, yo... —el rubor que tanto caracterizaba a la tímida Hinata hizo acto de presencia. Delatándola. Eso la ponía aún más nerviosa. ¿Qué sentía por él? No quería hacerle daño, ella tampoco quería engañarse. Pero... pero... ¡Ahj! Es tán dificil tomar decisiones... Y todavía más aquella que Neji le estaba planteando. Sus ojos empezaron a humedecerse.

—Sé que soy de la rama secundaria, tu protector, tu primo. Pero eso ya no me importa. Aunque seas tú una princesa y yo un simple servidor a tus pies. Hinata-sama... no puedo esconderme más. Sé que tu quieres a ese... a ese idiota. Pero ten clara una cosa: no espero que me correspondas, tan solo debes saber que nadie, jamás, te amará como yo.

Y la besó.

Cielo y Tierra




Tras pasar la segunda prueba, se introduce la metáfora del Cielo y la Tierra (ying y yang).
El autor deja expresamente de lado a Sasuke en la comparación para centrarse en Naruto y Sakura.

Si te falta el cielo, adquiere el conocimiento y prepárate para la oportunidad. Si te falta la tierra, busca fuerza para romper los campos. Juntos, el cielo y la tierra forman el peligroso camino: La senda de la justicia. Guarda en tu corazón el secreto del "....." y conviértete en guía.
*Tercer Maestro Hokage

Es una metáfora. El cielo se refiere a la mente. Mientras que la tierra representa al cuerpo.


"Si te falta el cielo, adquiere el conocimiento y prepárate para la oportunidad".


Naruto, tu punto débil está en el saber... Debes aprender siempre cosas nuevas... y prepararte para cumplir tu deber cuando llegue tu turno.
Y la segunda parte...


"Si te falta la tierra, busca la fuerza para romper los campos".


El punto débil de sakura es la falta de fuerza. Quiere decir que ella debe esforzarse y no dejar de entrenar ni un solo día.

En cuanto hayáis conseguido dominar "el cielo" y "la tierra"...
podreís llevar a cabo cualquier misión; 
por muy peligrosa que sea.

lunes, 23 de abril de 2012

Frases Blancas #5 - Those memories...

Alguien dijo alguna vez que...
las memorias son sólo fracciones de la mente.
Cuando recordamos, unimos estas fracciones a lo que pensamos
de la manera correcta.
Por lo tanto, las memorias son creaciones.
Recordar significa soñar...
Y las memorias no son más que meras ilusiones.
Anónimo

lunes, 26 de marzo de 2012

Frases Blancas #4 - En Llamas

-He venido a beber -digo.

Él se hecha a reir y deja la botella en la mesa con un buen golpe. Limpio el borde con la manga y le doy dos tragos antes de sufrir un ataque de tos. Tardo unos minutos en recuperar la compostura, y los ojos y la nariz siguen pringados, pero noto el licor dentro de mí como si fuese fuego; me gusta.

-Quizá deberías ir tú -afirmo, en plan pragmático, mientras acerco una silla-. De todos modos, odias la vida.

-Muy cierto. Y como la última vez intenté mantenerte viva a tí..., al parecer esta vez me veo obligado a salvar al chico.

-Es otra buena razón -respondo; me sueno la nariz y vuelvo a servirme.

-Peeta dice que, como te elegí a tí, ahora le debo una, lo que él quiera. Y lo que quiere es la oportunidad de ir de nuevo a la arena para protegerte.

Lo sabía. En ese sentido, Peeta es bastante predecible. Mientras yo me tiraba en el suelo de aquel sótano para lamentarme por mi suerte, pensando sólo en mis problemas, él estaba aquí, pensando sólo en mí. Decir que siento vergüenza no es lo bastante fuerte para expresar cómo estoy.

-Ni viviendo cien vidas llegarías a merecerte a ese chico. Lo sabes, ¿no?

-Sí, sí -respondo brusca-.
*  *  *

"Ojalá pudiera congelar este momento. Ahora mismo, aquí mismo, y vivir en él para siempre."


*  *  *


*  *  *

"Recuerda quién es el verdadero enemigo."

viernes, 16 de marzo de 2012

Naruto Shippuden ep. 235 - La kunoichi de Nadeshiko

-¿Por qué me has salvado?
-Ya he tenido suficiente de todo esto.
-¡No me refería a eso! ¡Has tenido la oportunidad de derrotarme!
-¿Y habrías estado satisfecha de ser así? Sólo por que es tu "destino", has cerrado tu corazón para buscar un marido. ¿No te parece una estupidez? Quiero decir, no es que yo sepa algo sobre el matrimonio y esas cosas, pero ¿no se supone que debes amar a alguien y sentirte atraída?
-Eso es...
-Yo amo a una chica llamada Sakura. En realidad, es sólo de mí hacia ella. Sakura está completamente enamorada de un tipo llamado Sasuke. Ella se esfuerza mucho para ir tras él y ganarse su amor. Cuando piensa en eso, su sonrisa es lo más bello. No hay forma de explicarlo. Antes de darme cuenta, me había enamorado de ella. Nunca la forzaría a quererme. No sería diferente de lo que hizo ese sujeto de hace un momento. Asi que me he hecho a la idea. De la misma manera que Sakura trata de ganarse a Sasuke, yo haré mi mejor esfuerzo para ganarme a Sakura.
-Pero mi destino...
-¡Eso no es el destino! Es sólo una regla que hicieron en la villa.
-Sí, pero...
-Usa tus habilidades para ponerle fin. No estoy seguro de si me he explicado correctamente; pero eso es lo que quería decirte.

*   *   *

-¡Naruto, pronto nos pondremos en marcha!
-¡Estaré ahí en un momento! Cuídate.
-Cuando termine tu misión... cuando regreses a tu villa ¿le dirás a esa persona que la amas?
-¿¡Eh!? No, todavía no tengo el valor de hacer eso. De todas formas, seguiré cuidándola.
-¿Estás satisfecho con eso?
-Claro que nada me haría más feliz que ella me escogiera algún día. Pero está bien.
Mientras Sakura sea feliz, eso es lo que importa.

*   *   *

¡Hola soñadores!  Después de esta traducción guachiflor Hoy quiero hablaros sobre un episodio de Naruto que me ha encantado. Más concretamente, una parte de él. 
Yo no suelo ver el relleno, es más, ni siquiera sigo el anime. Deja mucho que desear, y yo siempre he dicho que leer es muchííísimo mejor. Pero este capítulo lo vale; había que verlo.
SÍ O SÍ.
La curiosidad me entró al enterarme de que iba a aparecer un personaje random parecido a la prota femenina del manga, Sakura. Y eso me animó a verlo un poco.

El argumento es un poco pobre (es relleno, no se puede pedir más xD). Naruto estaba haciendo una especie de viaje, y por el camino pasan por ese pueblo, Nadeshiko, quedándose allí unos días. Lo que el rubio no sabe es que ese lugar oculta un "secreto".
Allí hay ciertas reglas. Cada mujer se bate en duelo con un hombre, el que ella elija, y si él gana, ambos deben casarse.
Jiraiya, el antiguo maestro de Naruto, viajó allí una vez. Dió la casualidad de que tuvo que enfrentarse a una mujer, la mentora de Shizuka (esta última es con la que Naruto pelea en el capítulo). Quedan empatados y deciden posponerlo para otra ocasión. ¿Razón? Jiraiya afirma que ya le ha entregado su corazón a otra mujer. Ambos hacen un trato. El discípulo de Jiraiya que pase por Nadeshiko en un futuro se enfrentará a Shizuka. Y da la casualidad de que es Naruto. Él desconocía todo esto hasta el momento de llegar allí.

Después del tema de la pelea y demás, ocurre. Es sólo fanservice, lo sé, pero lo disfruté mucho.
Naruto afirma no saber gran cosa sobre el tema del matrimonio, pero sí tiene claro lo que es amar a alguien.
Es su felicidad por encima de la tuya propia.
Al igual que su maestro, nuestro rubio protagonista dice que ya ama a alguien más. Y ese alguien es Sakura.
Tengo que reconocer que me emocioné. Todo lo que dijo Naruto en este capítulo ya se sabía desde hacía mucho tiempo aunque algunos no quieran aceptarlo con sus actos y frases a medio terminar... Pero NUNCA había convertido sus sentimientos en palabras. Al menos, no tan directamente.
Su declaración fue preciosa (y eso que a mi no me gusta mucho el empalagoserío), a lo mejor exagero, pero lo digo tal y como lo siento. 
No me lo esperaba. En el manga llevamos ya un tiempo sin tener nada de Naruto y Sakura, y esto ayuda a levantar el ánimo :P.

El final de Naruto está cerca, Masashi Kishimoto ya lo ha dicho. Yo sólo espero que le de un punto y final a esto de las "pairings". Porque, seamos sinceros, una gran parte del fandom de Naruto lo sigue leyendo por este tema, y Kishimoto lo sabe. Por eso, estirará el chicle hasta que crea conveniente zanjar el asunto.
Me encantaría que Naruto tuviera su oportunidad y pudiera decirle a Sakura lo que siente.
Esperemos que el señor Kishimoto piense lo mismo.

Despacito y con buena letra

He decidido estrenar esta sección con mi OTP (One true pairing. Es algo así como tu pareja preferida de manga), el NaruSaku. Supuesta pareja formada por Naruto y Sakura.
Hay infinidad de videos explicando esto y aquello, pero solo unos pocos "dan en el clavo". Un ejemplo es el de esta chica. Me parece que tiene muy buenos puntos que al leer rápido es fácil pasar por alto. Pero cuando te adentras en el contexto llama bastante la atención.

Un ejemplo: en una de las primeras sagas de Naruto, Gaara, el jinchuriki de una cola, ataca a la Hoja. Ergo, los amigos del prota están en peligro. Naruto está junto a Sasuke y Sakura, sus dos compañeros de equipo, e intentan vencer a Gaara (bueno, Sakura por aquel entonces no es que hiciera mucho...). Sasuke esta muy débil, Naruto es el único que aguanta en pie; y en una de esas, Gaara coge a Sakura. La tiene aprisionada contra un árbol mediante una mano gigante, creo recordar. Ella está inconsciente, claro. Lo último que ha visto ha sido a Sasuke intentando proteger tanto a ella como a Naruto. Lo curioso de todo esto es que, si supuestamente ella está enamorada de Sasuke... ¿por qué susurra el nombre de Naruto mientras se va quedando sin respiración? ¡No sabe que él esta luchando por protegerla!
Más tarde se ve como él se desvive por salvarla, además de unas insinuaciones por parte de otros personajes preguntando si era su novia... Finalmente, Sakura cree que ha sido Sasuke el que la ha salvado. Pero este último le dice la verdad. Ella mira a Naruto y le dedica una cálida sonrisa... que pena que Naruto no se diera cuenta.
A lo que voy es que todo esta conectado de alguna manera, y si vas leyendo a toda pastilla como esta señorita pues hay detalles como el que os acabo de escribir que pasan de largo.




No digo que Sakura amara a Naruto en el sentido literal de la palabra. Al menos no todavía. De ahí el título de la entrada "Despacito y con buena letra".  La relación de estos dos personajes va mejorando conforme pasa la historia, va madurando, como ellos mismos. Dando como resultado la ambigua segunda parte. En la que una parte se siente indigna por no poder cumplir una promesa, y la otra no sabe lo que siente.

El mensaje que yo saco, no solo de este video, si no de la relacion NaruSaku en general, es sencilla.
Los prejuicios pueden hacer mucho daño; hacer que te equivoques con alguien que creias inmaduro, para luego descubrir que debajo de toda esa fachada, hay un gran corazón.

jueves, 8 de marzo de 2012

Off-topic #4. Día de la mujer trabajadora

Bueno, antes que nada... ¡FELICIDADES A TODAS! (mí incluída XD)
Hoy, como bien dice el titulo, es el día de la mujer trabajadora, y tenia pensado hacer alguna cosilla; como una pequeña historia o algo así... pero no tengo mucho tiempo :(. De todas formas, sí tengo algo. Encontré ésta foto en uno de los foros que sigo; y la verdad, me encantó. Vosotr@s me diréis.



Me enamoré de la frase nada más leerla. Es más, me recordó a mi querido NaruSaku <3
Así que ya sabeís chicas, preciosas somos todas y cada una de nosotras. Sonriamos, que es lo más lindo que tenemos (rectifico; una de las cosas más lindas ;P). No debemos rendirnos; hay que seguir luchando por todo lo que queremos.

Espero que os guste mi pequeño aporte; quería hacer más, quizá otra cosa... Pero como bien dicen, ¡una imagen vale más que mil palabras!

Un fuerte aplauso para Bob Marley, se lo merece.

viernes, 2 de marzo de 2012

¿Finales felices?

 Viendo a princesas, sintiéndome como ellas.
Con sueños que se hacen realidad, con alguien a quien merezca la pena amar.
Amor verdadero. Creía que era cierto.
Que de un sólo beso, aparecería un apuesto principe que me querría como nadie. Que me rescataría cuando estuviera en peligro. Que estaría ahí para mí.
Más tarde, me fuí dando cuenta de que, en la vida real, las cosas no funcionaban así.
Pero, ¿qué iba a hacer? Tan sólo era una niña de ocho años con complejo de princesa.

Me di cuenta de que los chicos no eran tan delicados y atentos como los pintaban. Y mucho menos príncipes azules.
Aún así, tenía la esperanza de encontrarlo. Que lejos, en algún lugar, habría alguien con el mismo problema que yo.
Inlcuso peor.
"Ambos nos ayudaremos; jamás estaremos solos." Pensaba.

Luego vinieron las decepciones, y pasé de sostener al principe en mis manos, a cerrarme completamente al amor.
A dejarlo a mis pies. Yéndome lejos.
"¿Para qué besarlo, si nunca se convertirá en príncipe?"

Luego empecé a soñar con ellos. En todas y cada una de las historias que leía, a veces incluso me hacían volver a pensar que los finales felices existían.
Me daban un pelín mas de esperanza.

Soñaba con encuentros inolvidables, besos mágicos y amistades duraderas.
Me metía en esas historias, repletas de aventuras, para así poder evadirme de todo. Poder ser yo misma, poder soñar, desear, sentir y llorar por cosas que realmente merecían la pena.
Una vez, una amiga me dijo:
"Te refugias mucho en los libros."
Antes no me había parado a pensarlo, pero no podía tener más razón.

Me he dado cuenta, de lo que sería yo ahora sin ellos.
Me hacen ver que hay algo más allá, que aún queda soñar.

Y sí, puede que no haya final feliz. Pero lo importante es hacer de tu vida un sueño. Sin alejarte demasiado de la realidad.

sábado, 25 de febrero de 2012

Frases Blancas #3 - Mientras pueda seguir soñando, seguiré soñando contigo

"Clary,

A pesar de todo, no puedo soportar la idea de que este anillo se pierda definitivamente,
como tampoco soporto la idea de dejarte para siempre.
Y aunque no tengo alternativa respecto a lo segundo, al menos sí puedo decidir lo primero.
Te dejo el anillo de nuestra familia porque tienes tanto derecho a conservarlo como yo.

Escribo esto mientras veo salir el sol. Estás dormida, noto cómo sueñas al observar tus párpados inquietos.
Me gustaría saber lo que pasa por tu cabeza. Ojalá pudiera colarme dentro de ella y ver el mundo a través de tus ojos. Poder verme a mí mismo como tú me ves. O puede que no quiera verlo.
Puede que eso me hiciera sentir más aún que estoy perpetuando una especie de Gran Mentira en tí, y no lo soportaría.

Te pertenezco. Podrías hacer lo que quisieras conmigo y yo te lo consentiría. Podrías pedirme cualquier cosa y yo me desviviría por hacerte feliz. Mi corazón me dice que este es el mejor y mayor sentimiento que he albergado nunca. Pero mi mente sabe la diferencia entre desear lo que no puedes tener y desear lo que no deberías. Y yo no debería desearte.

Llevo toda la noche viéndote dormir, observando cómo se alza y se desvanece la luz de la luna, proyectando sus sombras sobre tu rostro en blanco y negro. Nunca había visto nada tan bello.
Pienso en la vida que podríamos haber tenido si las cosas hubieran sido diferentes, una vida en la que esta noche no sería un acontecimiento aislado, separado de toda realidad, sino lo que serían todas las noches.
Pero las cosas no son diferentes, y no puedo mirarte sin dejar de sentir que he sido yo el que ha provocado que me quieras.

La verdad que nadie se atreve a decir en voz alta es que yo soy el único que tiene una oportunidad frente a Valentine. Sólo yo puedo acercarme a él lo suficiente, puedo fingir que quiero unirme a él y Valentine me creerá, lo hará hasta ese momento último en el que yo termine con todo, de un modo u otro. Tengo algo de Sebastian; puedo rastrearlo hasta el lugar donde se oculta mi padre. Y eso es lo que voy a hacer.
Así que te mentí anoche. Dije que sólo quería pasar una noche contigo, pero lo que querría es pasar todas las noches contigo. Y es por eso que debo salir por tu ventana ahora, como un cobarde.
Porque si tuviera que decirte esto a la cara, no podría marcharme.

No te culpo si me odias, ojalá lo hicieras.
Mientras pueda seguir soñando, seguiré soñando contigo.

Jace".
Cazadores de Sombras, Cassandra Clare

miércoles, 15 de febrero de 2012

Melodías que susurran #2 - Laugh Maker

    Sacaste un pequeño espejo, 
lo pusiste frente a mí y dijiste:

   "Tu rostro lloroso puede sonreir."

    Sorprendentemente, de hecho, sonreí.

lunes, 16 de enero de 2012

Algo para darle vueltas~


Una de las cosas que más odio en éste mundo, es el amor no correspondido.
En el peor de los casos, sufren ambas partes.
Una por no poder amar; la otra, por no ser amada.

viernes, 13 de enero de 2012

Me encanta...

Me encanta la combinación del suave canto de los pájaros
y la tenue brisa de la madrugada.
Me encanta sentir el viento sobre mi piel
mientras revuelve mi ondulado cabello.
Me encanta tumbarme sobre la hierba
y leer sin interrupciones.
Me encanta escuchar los susurros del silencio.
Me encanta que me sonrías y me digas
que todo va a salir bien.
Me encanta que me protejas y te preocupes tanto por mí.
Me encanta que me comprendas.

Me encantan las tardes de lluvia que me inspiran
a comenzar una nueva historia con mi pluma celeste.
Me encanta el atardecer, con su cielo anaranjado,
cálido y reconfortante.
Me encantan las silenciosas noches, cubriéndolo todo
con su manto oscuro, repleto de estrellas.
Me encantan todas y cada una de esas estrellas,
todas con un hermoso sueño que cumplir.
Me encanta la luna, con su continua y silenciosa
batalla de miradas;
con su romanticismo que ha inspirado a más de uno.

Me encantan todas éstas cosas, que me tranquilizan
y me hacen sentir viva.
Pero sobre todo, lo que más me gusta,
es tu preciosa sonrisa.
Que me ha ayudado tánto en tántos momentos.
Porque si no la veo cada día,
noto que me falta algo.

Me encantan las noches cómo ésta, bajo la lluvia.
En la que me dijiste aquello que quería oír,
que por fín salió de tu interior.
Y que yo, sin dudarlo un sólo segundo,
te respondí.
Sí.

jueves, 12 de enero de 2012

Cansada...

Cansada de no ser como debería ser.
Cansada de anhelar lo que no tengo.
Cansada de no ver lo que ya poseo.
Cansada de no poder proteger a aquellos a los que quiero.
Cansada de las esperanzas y sueños rotos.
Cansada de ésta irremediable impotencia.
Cansada de éstas insaciables dudas.